miércoles, 6 de marzo de 2013

Confesiones de una ex hincha bolainas

Publicado por Gringa en 8:25 19 comentarios


Lean primero al más rico blogger @guendelman en: http://www.eldinamo.cl/blog/hinchapelotas/

Todo esto nació por las bolas que tuvo Rodrigo, el bello hombre, en exponer la realidad de la mayoría de los hombres; NOSOTROS HINCHAMOS LAS BOLAS.

Pero es que ¿QUÉ CRESTA NOS SUCEDE? La expresión de la foto que elegí cuidadosamente refleja todo lo que nos produce el acto mismo de hinchar...felicidad.

Años de hinchapelotismo leninismo han mermado mi espíritu. Pasé años haciéndoselo a un hombre y ahora entiendo todo. Nosotras somos las únicas mamíferas de este planeta que queremos que todo se haga a nuestro estilo y si no es así, alegamos, hacemos que los otros exploten y perdemos finalmente.

Ahora, la única explicación que encuentro es que nosotras envidiamos la simpleza masculina, es decir, la capacidad de ustedes de estar relajados, de pensar en "nada" (ojo ahí), de tomarse todo a la ligera, de no enrollarse, cuestionarse, etc. Lo digo porque recuerdo esos años hinchapeloteando y mi rabia: lo veía tranquilito ver tele, con cara de zombie y no podía soportar que estuviese ahí, sin hacer nada, sin ordenar la cochiná que había dejado en la cocina...y entonces empezaba a hincharle el saco escrotal de tal manera, que terminábamos peleando, discutiendo, quizás hasta yo me ponía a llorar y todo mal.
MAL POS HUEÓN.

Y lo peor de todo es que, como dice el artículo del washito rico, no nos funciona la hueá. Obvio que no nos funciona po, nos movemos por la "rabia" que nos produce que estén ahí, sin hacer nada y luego la hinchazón termina por producir roces, peleas y sin que hagan las cosas como nosotras queríamos o para peor, que las hagan de mala gana diciendo ASÍ QUERÍS QUE HAGA LA HUEÁ? AH? TE GUSTA ASÍ?

Hoy en día, aprendí. Soy una hinchapelotas rehabilitada (o por lo menos lo intento con todas mis fuerzas). Es que descubrí algo y que se los voy a contar como secreto: Amigas, NO RESULTA EL HINCHAPELOTISMO.

Una vez una señor muy sabio me dijo: "cuando algo te de rabia, algo que haga o no haga tu pareja, no hagas lo primero que se te ocurre. Piénsalo y haz algo al revés de lo que ibas a hacer". Es medio complejo pero se los expondré en una situación.

Tu hombre sale con amigos a carretear y te PROMETE que volverá a las 2 am. Son las 7 am y tú estás despierta y sola en tu cama..con obviamente rabia, pena y pasándote todos los rollos del mundo. Son las 9 am y él llega hiper curao y medio shalao. ¿Qué haces?

Alternativa hinchapelotas: ¡PERO COMO CHUCHA VENÍS LLEGANDO A ESTA HORA! ¡ME PROMETISTE QUE LLEGARÍAS A LAS 2 AM Y VENÍS TODO CURADO POR LA CRESTA!

Alternativa progresista y evolucionada: Mi amor, ¿cómo lo pasó? ¿Quiere un cafecito? A ver, acuéstese un ratito y le hago cariñito.

Obviamente, todas me culparán de mamona y poco feminista. MENTIRA.
Esto es lo más feminista que podría hacer y ¿por qué? Bueno, porque cuando yo hago eso, recibo todos los premios que quiero, evito la pelea del momento y luego que se despierta,  está tan descolocado como admirado por mi comportamiento. Es una especie de intercambio de cosas, casi como un negocio queridis. Usted lo trata bien cuando debería putearlo por algo que se equivocó y él, seguramente, esa noche le va a dar como nunca le había dado o le comprará ese vestido tan lindo que vio en una tienda o incluso, podría hacer el aseo del baño, eso que siempre ha dicho que odia.
Sea más vivaldi.

He dicho, palabra de Gringa Jorni.

 

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