viernes, 25 de mayo de 2012

Eyaculadores precoces

Publicado por Gringa en 7:35 3 comentarios
Hablar de eyaculación precoz de manera larga, dura y sostenida es casi tan ridículo como creer que Twitter es un oasis de virginidad y recato, o que mis colegas jornis comieron huevitos de chocolate, y no de esos otros peludos y hediondos durante Pascua de Resurrección. La verdad de la milanesa es que el mashoh shoroh shilenoh se niega a reconocer que tiene un severo problema entre las piernas y la mayoría, por no decir todos, cuando enfrenta el tema en una conversa, se corre por la tangente con el tradicional “puta, qué mala onda que te tocaron locos así. A mí no me pasa eso”. ¡Las pinzas! ¡Puro verso! ¿Sabían, chiquillas, que a 8 de cada 10 chilenos se les dispara el decorador de torta antes de tiempo? Ésa es la dura, la neta, la firme. ¡Qué penca! Entiendo, mi negro caliente, que si usted viene saliendo de la cana, de un retiro espiritual o de la mina San José, o desembarcando de un pesquero de alta mar, pasado a merluza y más acumulado que la deuda histórica, con sólo mirarle el escote a una hembra se le arranquen las cabras pa’l cerro. ¡Pero en condiciones normales, no pues, porque deja a su pareja mirando pa’l techo!
 Según los que saben, el gil que en la mitad de sus polvos dura menos de dos minutos es eyaculador precoz aprobado con distinción máxima, porque no es capaz de controlar su herramienta. ¿Cuántas relaciones serias y otras no tanto acaban mal porque el muy lindo se va cortado con un catálogo de ropa interior o mirando la promo de “Infieles”? ¿Cuántas mujeres deciden, por lo mismo, buscar en un amante de verdad el placer que su mino no les puede entregar? Y después los caraduras se quejan… Gozar del sexo es una garantía democrática, por lo que un eyaculador precoz podría considerársele simplemente un fresco de raja, un estafador, un maldito especulador y cuentero: Se satisface solito y deja a su “socia” pagando. ¡Como para denunciarlo al Sernac! Hasta la mina más hermostra tiene derecho a un revolcón como la gente y alcanzar a mandarse un gritito de lujuria, por lo menos, digo yo. Y la satisfacción tiene mucho que ver con el tiempo, porque en dos minutos, el posacompleto femenino no logra quedar pochito ni cagando.
Como una manera de orientar a las chicas que buscan sexo del bueno, cacheteo de calidad y ¡con orgasmo!, me atreví a sacarles la foto a estos compadres que tienen la pistola con la bala pasá, el gatillo suelto, la salchicha rajá, la llave de paso rodá, etc. Y detecté dos grandes categorías que comprenden a la mayoría de estos perejiles sin brillo:

 1) “EsPrimeraVezQueMePasa.cl”: Éste es el más típico. Puede encontrarlo en su vecino, su mejor amigo o, incluso, su novio. Este pericote anda con todos los juegos de azar acumulados, pero de nacimiento. Su película favorita es Bambi, y se identifica plenamente con el conejito Tambor y su patita hiperquinética. Empieza el arto meesmo y ¿qué pasa?: No alcanza ni a meter el casco del gladiador y ¡pfaff!, se le sube la leche con plátano. Y nosotras, las minas, ahí, tiyibles de entusiasmás, nos quedamos mirando cómo el Abelardo onfayer dura menos que una canción panketa. Apenas consigue “met” en vez de meterla y larga todo el petit fort. Y se va en puras excusas: “No sé qué me pasó”, “es que tú me vuelves loco” o “debe ser porque estoy muy enamorado de ti”. ¡Chantas! ¡Así no se vale, pueh!

 2) El de película gringa: Este tipo de timador sexual es comparable con ese típico actor yanqui con cara de weón que sale en las películas malas de Hollywood. Habitualmente es pajero y apenas ve a una mina rica, se le derrama el chuño. Fácil y rápido. Se demora menos en irse que en lo que una casa comercial te pasa una tarjeta de crédito. Y queda siempre chorreado de quáker… incluso con la ropa puesta. Basta con cerrarle un ojo para que le salpique el milkshake. ¡Es algo atroh, en verdad! Una amiga me contó que una noche estaba bailando con un loco, onda a lo reggaeton style (bien azikalá y sobajeá) y que en un momento sintió que todo estaba mojado en la zona del avistamiento. O sea, el cabro se fue en volá. El problema es que hasta ahí, nomás, le llegó el romance a mi comadre. Otra me contó que le dio un par de besos en el ascensor al botones de un hotel. Comenzaron en el piso 2 y en el 7 el tonto ya estaba pidiendo pañuelos desechables…

¿Cuál es el problema de estos eyaculadores precoces?: Tienen el dispensador de silicona muy sensible, así que hay que tratarlos como hija única de padres separados. ¿La solución, machos?: Respiren hondo, no hagan las cosas atolondradamente e imaginen que es la Maldonado la que está haciéndoles un mamón con el calzón metío en la celulitis. Ejerciten con el muñeco unas cuantas veces al día para aprender a controlarlo y, sobre todo, vayan a la farmacia (Chile está lleno) y compren esa crema que les ponen en las encías a las guaguas para que no lloren, para que se les adormezca el chacotero. ¡Y entiéndanos un poquito a nosotras, que vamos con todas las ganas de disfrutar y no llegamos ni a la D! Ahora, cabras, ¿cómo identificar a los socios con el tubo de cola fría desbocado? ¿Cómo evitar meterse con un mula que se va cortado antes de que lleguen las piscolas de cortesía? No es tan fácil, pero le daré unos tips que, por experiencia propia o adquirida por amistades, creo pueden servirles.

Es eyaculador precoz si…
- Se muerde las uñas, ya que demuestra desesperación y, por lo tanto, atarantamiento y ahueonanés. --

- Tiene el típico tic del pie eléctrico, ya que, como sabemos, padece el mal del conejito Tambor.

- Es adolescente y virgen (estás cagá si esperas que rinda más que el confort de 120 metros).

- Tiene cara de gringo ahueonao y se llama Jimmy, Alex, Evan, Yayote, Tranfugo o sus derivados.

- Se viste con ropa pasada de moda y mientras camina, a lo lejos se escucha “soooooy un perdedoooor, I’m a looser, baby”, de Beck.

- Te confiesa abiertamente que no se acuerda cuándo fue su última encamá.

- Cuando habla de tiempo de relación sersual, dice “da lo mismo el tiempo, lo importante es cuando te vai” (sin hacer alusión a la acompañante).

- Se sienta con las piernas juntas y con las manos sobre el paquete.

- Le das un beso y comienza a sobajearse como si el mundo se fuera a acabar mañana.

- Se tira de hacha a las gomas, porque está demostrado que a los mamones siempre se les rebasa la leche antes de que de verdad les hierva.

Palabra de Gringa jorni.

El amigui

Publicado por Gringa en 7:34 0 comentarios
Todos hemos visto ese maldito meme de la niña rubia riendo que le dice algo hiriente a un mejor amigo, y lo deja con las ganas. Esta caricatura, al igual que todas las existentes, es demasiado real. Muchas de nosotras (me incluyo, porque pasé un tiempo de demonio y de experimentación maldadística) hemos tenido ese amigo partner, que nos apaña en todo, nos escucha, nos saca a pasear, nos hace masajes, nos pone el hombro para llorar, etc. Ese amigo que está en todos lados, que nos viene a ver en las horas más increíbles y nos tiene paciencia hasta el infinito… ¿por qué? PORQUE ESE AMIGO NOS TIENE GANAS, como muy bien mostraba el comercial de la bebida blanca. Pero lo que muchos no saben (pero intuyen, seguramente… no quiero subestimarlos a ustedes ONVRES) es que nosotras SABEMOS PERFECTAMENTE que están completamente prendados de nuestras tetainas, que nos imaginan en pelotas todos los días en la ducha y que cuando nos abrazan, es pa’ que nuestros chocapic de frío se sientan más profundamente.

Lo sabemos, lo tenemos más claro que la Aránguiz tiene carecuica, una cosa absolutamente segura y clara. Lo más divertido de todo esto es que nos aprovechamos. Digo divertido, porque son ustedes mismos los que se dejan. Ahora, este tema tiene mucho que ver con mi columna anterior de las calienta sopas; cuando una mujer se da cuenta que hay un “mejor amigo” a la vista, aplica todas las estrategias para mantenerlo ahí, en la palma de la mano (ya saben cuáles son las estrategias, o si no, revise el texto anterior). Respecto de este problema, podríamos decir que hay dos aspectos que hacen que este fenómeno ocurra; las minas maragas y los hueones tontos. Me reconozco maraga. Sí, acabo de decir que a veces soy maraga. Ser maracuyá es complejo, porque tienes que mantener el personaje todo el tiempo, y ser firme y convincente. Es difícil, créanme, pues lo intenté un par de meses y fue un desastre… me conmovía la carita de gato de Shrek que me ponían esos “mejores amigos” y terminaba por abortar misión, y tomarme la sopa onfaya. El asunto es que esos hombres son, en simples palabras, maragos y en castellano antiguo, “todo lo que nosotras necesitamos, pedimos y porque somos tontas y aprovechadoras, preferimos mantenerlos ahí, en llamada en espera”. Esto está pésimo, señoritas, es que no podís. Básicamente, muchas de estas maracaibas tienen un pololo y tienen al amigo/pseudo pololo al mismo tiempo, lo cual trae mucha mardá a la situación. ¿Y el resultado de esto? ONVRES peinando la muñeca (y el muñeco a falta de) pesado, traumados de por vida, lo cual los lleva a cambiar esa “bondad absoluta” que los caracterizaba y terminan siendo un saco de bayaga, o sea, pura mierda de personas. 


Estoy casi 100% segura que muchos de los imbéciles y feos con los cuales nos topamos día a día (la cifra está en crecimiento) son hijos perdidos y mashohs castrados por una mejor amiga. No es que nos guste hacer daño, pero es que muchos se dejan y les “acomoda” el papel de mongolos. Y aquí es donde surge el siguiente problema: los hueones tontos. Puede que sean los seres más inteligentes del planeta, pero caen lamentablemente. Caen como babosas arrastradas y se mantienen ahí. No sé cuál es la razón y tampoco sé describir que la manipulación de parte de la féminas sea tan fuerte como para mantener por años a un hombre con la tula a media asta (sorry lordi). La cosa es que los hombres se dejan, nadie los obliga y yo creo que ellos se mantienen con la esperanza permanente de que algún día, en alguna galaxia lejana, la princesa les muestre el sapo y todo sea lindi. Pero no, eso nunca o casi nunca sucede… ¿por qué? Porque son ustedes mismos los que envían señales equivocadas. No entiendo por qué razón se esmeran en decir “amiga” (con eso ya cortaste de raíz la posibilidad) o siempre “están ahí”. El “estar ahí” es el paso básico para ser hueón. Al parecer, muchos de estos hombres que “siempre están” faltaron justo a la clase de introducción a la conquista, pues TODOS saben que estar siempre disponible es signo de desesperación/necesidad y que lo que hay que hacer es “hacerse de rogar” un poquito. Está bien que sea el amigo partner, el que ayuda en todas, pero no siempre. Dé un poquito y luego quite, esa es la clave (acabo de dar el secreto máximo y todavía no escucho los coros angelicales cantando). Si a usted le gusta la niña, le gusta del verbo “me la quiero comer enterita y dejarla loca”, vaya haciendo pruebas. Un día no la pesque, al otro día la pesca… deje que el teléfono suene más de medio ring. Si ella le pide masajes, pídale usted también.

En resumidas cuentas, PÓNGASE LOS PANTALONES (y aunque suene machista la recomendación, es cierta y aplicable para ambos sentidos). No deje que lo pasen a llevar, no se muestre desesperado; ni las amigas, ni las maragas ni ningún ser quiere a alguien que sufra un amor enfermizo por uno. Queremos hombres con capacidad de decisión y seguridad… eso es lo que básicamente queremos. Pero usted no piense tampoco que por hacerle favores, invitarla a todos lados y ser preocupado por ella, le va a dar la pasada. No, señor. Tiene que ver un interés más carnal, o si no la imagen que nos formamos en la cabeza es puramente amigable. Y nadie se calienta con eso, ¿o sí? Ahora, maragas, a ustedes les hablo. NO SEAN MALAS, que la mardá se devuelve por 1.000. No podís hacerle eso a un mino y creerte la raja (porque sí, yo he escuchado a minas decir “no te preocupí, el Juanito me hace todo, porque está baboso por mí”). Además, si un hombre, ese que es su amigo, si le da seguridad y la contiene, no es asexuado… se calienta más que usted. Y créame, por experiencia propia, seguramente le va a sorprender al momento de amar y la va a dejar viendo estrellitas. La macha le va a gotear, como dice el @flaitechileno, de sólo pensarlo. Hágame caso. Palabra de Gringa Jorni.

Las calienta sopas

Publicado por Gringa en 7:33 0 comentarios
Según la RAE (sí señores, acabo de citar la RAE en una web con nombre de aparato reproductor masculino), CALENTAR es "comunicar calor a un cuerpo haciendo que se eleve su temperatura". La verdad es que esta definición se aplica más que todo a teteras y cualquier tipo de calor directo, pero la aplicaré para lo que quiero relatar a continuación. Los simios que tienen la característica de comunicar el calor a otro cuerpo pueden ser hembras o machos, aunque generalmente pertenecen al primer género, que tiene un sus genes ese atributo/mal. Ahora, la clave de este tipo de seres es el "comunicar", pero esa comunicación es sólo en señales equivocadas y significantes mal entendidos por el receptor, es decir, en resumidas cuentas, PURO QUE CALIENTAN LA SOPA LAS ESTÚPIDAS Y DEJAN A LOS HUEONCITOS CON LA MANSA CARPA.

 Distingamos tipos de maracaibas calienta sopas, las cuales son antiquísimos. Según mi punto de vista (de paso les digo que soy cuatro ojos), son los siguientes:



 - Amigui calentatus picus: Es la típica amiga rica, esa mina que le lleva un buen par de tetainas, el potito bello y es flaca. La mina sabe cómo es, pero tiene el eterno pololi forever zorrón que no está ni ahí con nada. La mina es tellible de jelo kiti y se hace la tonta constantemente. Es así cómo consigue que todos sus amigos se pongan babero en cada carrete y le den de todo. Y los otros simios, como se mueren por ella (hace años generalmente), le dan de todo. En resumen, la mina sale a carretear sin ni uno, y lo pasa como rica y famosa.



 - Minus bajus atoestimae habet: Ésta también es igual o más ricarda que la anterior, pero tiene el problema de la baja autoestima. O con comillas el asunto, por que no me trago la cuestión ni con sopapo. La mina se pone los mansos escotes, los pantalones de esos ?levanta ánimos? y se saca fotos en el espejo del baño (a veces se ponen creativas y cambian el paisaje) y luego las suben a alguna red social. Ahí vuelven los simios con babero corriendo para decirles lo bellas que son, que el potito está rico, que quieren una rusa, etc.



 - Minatum comet heladus u otros, parando pichulat: Da lo mismo si es wena o no, la cosa está en la lengua y en el estáil. La cabra suele comprarse de esos helados bien chorreaos y esos vasos que ?justo? se derraman, etc. Entonces, se dispone a comer y comienza con la lengüita de arriba abajo, chupa, chupa, arriba, se le cae un poco en la mano, sigue chupando? [censurado pa que no se sigan calentando]. El copete sí que es entrete. Se sirven un vaso y justo se les derraman unas gotitas en el escote. La gotita corre por loh peshoh belloh y ella mete la mano, se los acomoda y sigue tomando. - Rosa melfierro con las tetatum: Este ser es como el santísimo Dioc, está en todos lados: Micro, metro, carrete, familia, etc. Es como el Pokemón que lo único que sabe hacer es rozar con el poto o los zonpe alguna parte del cuerpo del masho. Incluso hay algunas que suelen rozarse con cosas (como si no fuera suficiente la mardá) y ahí están los cabros, firmes y endurecidos en sus argumentos.



- La_tuitera_con_hartos_guiones_bajos: También se aplica para el féisbuc, con un nombre bellàko, ojalá con tildes inexistentes en nuestra lengua. La característica principal de esta especie es poner fotos de avatar bien sexuales (generalmente de alguna parte de su cuerpo, casi nunca lo ponen entero) y esperan la reacción. Ahí están los infaltables, los que babean con un par de tetas (a veces ni tan lindas ni ricas) o un poto contundente. Pero no sólo se quedan ahí y suelen responder las provocaciones sexuales, a veces haciéndose las shoras o las tontas (depende del día). También se limitan a expresar el gusto por el cuatro letras, que se quieren sentar arriba de él, que le metan uno en la boca, etc. Esta raza, la cual está cada día más de moda, tiene características que son comunes para todos los tipos: Casi todas están pololeando o tienen marido, todas hacen la mardá sin importar cuán duro esté el cabrito y no les importa, no reconocen que calientan la sopa (se hacen las hueonas cuando alguien las enfrenta) y nunca, PERO NUNCA se toman la sopa que calentaron, por lo tanto, son malas así de adentro. Su objetivo es simple, sobajear, abrazar, comer helados pornamente, subir fotos coshinas pa' puro levantar mástiles, izar las banderas y dejarlas ahí, abandonadas.



No entiendo el por qué de esta situación y me enoja mucho con mi género. No puede ser esto, señoras? Si la calienta, no la deje en el microondas. Tómese un sorbito que sea, ¿no le da pena? Ahora, para que existan este tipo de minas, tienen que existir esos, los BABOSOS. Sres BABOSOS: Un poquito de respeto consigo mismo. Identifíquelas, ahora que sabe, mírelas y no las tome en cuenta, porque mientras más cuerda les dé, más calentona se pondrá ella y usted, mil veces más pobre de cómo llegó. Ahora, si se encuentra a la joyita, la que es los cinco tipos en uno, corra, corra subiendo los brazos y abriendo un poco su boca. Ojalá se mueva en círculo para quitarla de su mente o piense en la Teletón, aquellos niños con fierros en sus pobres piecitos y don Chanchis llorando a moco tendido. Quizás esa imagen le ayudará a no ser la típica sopa fácilmente calentable. Y usted mujer, si quiere conseguir algo, no sea tan mala y menos si tiene pierna. ¿Le cuento algo? La mardá se devuelve. He dicho. Palabra de Gringa Jorni.
 

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